Matrimonio de Onur y Sherezade

Convencer a Sherezade Eviyaoglu de que él era el hombre de su vida y que casarse era el paso que tenían que dar en la ficción de “Las mil y una noches”, le costó hartos capítulos a Onur Aksal. Desde entonces, el catete galán turco no ha dejado detalles al azar y peor que novia nerviosa, se ha encargado de revisar todos los detalles del matrimonio que se acerca.

Eso, mientras en la pantalla de Mega se ha alimentado la curiosidad de los televidentes con spots de la teleserie con la frase “semana decisiva” y con capítulos (el del miércoles marcó 27,1 puntos de sintonía) en los que abundan escenas como las de Sherezade yendo y viniendo con su antipática suegra a la modista que le hace el vestido de novia, de la pareja revisando los partes, lista de invitados, decoración de la fiesta y en los que se insinúa que el gran acontecimiento se verá en el capítulo de este domingo.

Pero, ¿cómo son los matrimonios en Turquía? Viktorya Ozbicakci, 24 años y residente en Chile desde los 12, dice que “la religión es la primera y gran diferencia que marca las costumbres y estilo de celebrar un matrimonio en mi país. La mayoría son musulmanes (ella cristiana ortodoxa) por lo que el rito es distinto”.

Vamos por parte. Después de que una pareja se compromete en matrimonio, son los padres de ambos los que toman el toro por las astas.

“Hacen una reunión en la que se ponen de acuerdo en los detalles de la ceremonia y fiesta. Los hijos sólo escuchan. Opinamos poco, jajajá”, revela. “Los papás del novio son los que, por tradición, corren con los gastos de la fiesta e incluso el vestido de la novia. No puede ser de otra manera. Ellos tienen que mandar a hacer el vestido que va a usar la mujer de su hijo”, agrega.

Eso, mientras la mamá de la novia tiene la misión de preparar el ajuar y organizar la despedida de soltera.

-¿Cómo es una despedida de soltera musulmana?

-Las amigas, madres y hermanas se juntan para pintar las manos de la novia. Figuras muy lindas que se hacen con hena. Toman el té y comen dulces (pastelitos).

-No hay vedettos.

-No, jajajá. Como tampoco hay matrimonio en la mezquita, que es la iglesia de ustedes.

Recep Gani, 34 años y casado hace 8 con la chilena Paulina Massose, lo aclara. “La mezquita es un lugar sagrado, un lugar de oración. La ceremonia religiosa la hace el imán, nuestro sacerdote, y es en una de las casas de los novios sólo con la familia. Después de eso, recién se celebra la unión civil y de ahí se hace la fiesta con amigos y familia”.

A diferencia de su familia, él sólo se casó por el civil, porque Paulina es católica y ambos quisieron conservar sus credos.

Lo que no cambiaron fue la típica fiesta turca. Estas se hacen en salones u hoteles, se brinda con raki (licor de anís), comen torta de novios como acá y, a diferencia nuestra, los invitados “acostumbran poner dinero y joyas en el vestido de la novia. A mí también me pusieron. Es para la abundancia y para tener dinero para empezar la nueva vida”, relata.

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