Hijo de Pamela Jiles detenido por robo

“No quiero verlo en este momento, quizás eso a él le importa”, cuenta Pamela Jiles, hablando de su hijo Gastón Muñoz (20), universitario, modelo publicitario, detenido el jueves en el Costanera Center, acusado por hurtar ropa y un collar desde dos locales (ver recuadro). La periodista está sentada en el estudio 1 de La Red, saliendo en vivo por TV desde “Intrusos”. Se ve tranquila, a veces frágil.

“A Gastón lo quiero mucho”, parte diciendo, “él tendrá que bancarse esta situación como cualquier ciudadano del país (…) desde que lo detuvieron no he podido hablar con él”.

Ante la pregunta de qué sintió cuando vio a su hijo esposado, Pamela quedó pensativa: “Sentí quedar suspendida en una situación de irrealidad y decir pucha que lo quiero y en este minuto lo quiero más”.

Alejandra Valle, a cargo de la entrevista, le consulta sobre algunas críticas que la trataban de “mala madre”. Jiles pone el pecho: “Yo asumo como madre lo que sea con mi hijo: los insultos, la vergüenza. Lo hago feliz, estar cerca del Gastón es el mejor lugar; a mí me gustaría morir en los brazos del Gastón”.

A Pamela le preguntan ahora por qué cree que su hijo robó: “Yo no sé lo que exactamente ocurrió, lo que tengo claro hasta ahora es que Gastón le reconoció a su abogada que efectivamente él robó… no le he podido preguntar por qué lo hizo. Es terrible que esta cuestión sea pública porque en realidad esta es una cuestión que yo hubiese esperado conversarlo en privado… No sé por qué robó”.

“¿Qué le dirías a Gastón si lo tuvieras al frente?”, consulta Ale Valle. Pamela primero opta por la dulzura: “Le diría que por qué no vuelve a ser mi chiquitito, mi guagüito, pero también me gusta que sea él… No sé… parece que no tengo muchas ganas de verlo”.

Silencio en el estudio. Pamela continúa hablando. “Seguramente va a llegar el momento rápido donde tenga ganas de verlo, pero en este momento concreto, perdonen, no sé qué tiene de tan terrible (decirlo): no tengo ganas de verlo. Estoy muy enojada, muy asustada, como en una situación un poco irreal”.

“No es muy bonito que tomen preso a tu hijo por ladrón”, prosigue, “quizás esto hubiese sido diferente si lo agarran por otra cosa”.

A la pregunta de por qué Pamela no asistió al Centro de Justicia a ver a su hijo, y si esto podía ser interpretado por su hijo como “una falta de apoyo”, la periodista fue enfática: “Me importa un bledo como lo vaya a interpretar porque en realidad yo me siento la afectada en estos momentos”.

“Yo creo que él esperaba que yo lo fuera a salvar como siempre… ahora es mayor de edad, lo hemos hablado y que no queda otra”, termina revelando, tras casi dos horas de entrevista donde nunca se quebró.