Encontraron cuerpo de Bastián Bravo
Unos diez amigos del joven llegaron hasta el lugar. Uno de ellos, Manuel, contó a hoyxhoy que se enteraron del hallazgo después de que una amiga de Bastián se contactó con la PDI, tras oír rumores sobre el hallazgo. El joven además contó que le causó extrañeza que se hallara el cadáver justo en un lugar que la PDI ya había rastreado varias veces.
El persecutor Alejandro Sánchez, de la fiscalía Centro Norte, confirmó que "la PDI ha realizado una labor continua de rastreo de este lugar". Sánchez además señaló que "el predio cuenta con 2.400 hectáreas, con una topografía de difícil acceso", lo que explicaría que luego de que se haya barrido anteriormente el sector, recién se encontrara el cuerpo.
El fiscal además rechazó detallar las características de las lesiones del cuerpo, pero sí especificó que lo manipularon con el mayor cuidado posible para que el Servicio Médico Legal pueda realizar las pericias correspondientes. Sin embargo, según consignó Emol, fuentes del Ministerio Público dijeron que el cuerpo tenía hematomas y cortes que podrían ser por el tiempo que estuvo en el lugar o debido a una caída.
Aún no se puede establecer la causa de fallecimiento, pero según Sánchez, el cuerpo tendría una data de muerte que iría entre un mes y tres meses, y que el cuerpo hallado estaba sin ropa.
Al momento de su desaparición, Bravo vestía una polera morada, un chaleco negro, jeans de color azul oscuro y zapatillas blancas. Con esas descripciones lo buscaron durante 69 días, hasta que los perros de la PDI dieron con el cuerpo.
El joven fue visto por última vez el 13 de noviembre de 2013 en la comuna de Estación Central, luego de haber discutido con sus padres, Iván Bravo Burboa (47) y Mireya Sepúlveda Vivar (44).
El caso llamó la atención desde un comienzo porque sus padres hicieron la denuncia horas después de su desaparición. Además, los padres decían temer "lo peor". Incluso dirigieron las búsquedas hacia un cerro al que decían que Bravo siempre iba cuando tenía problemas. Luego, el caso dio un giro inesperado, después de que la PDI encontrara imágenes de carácter sexual de la hermana de seis años del joven, almacenadas en el computador de la familia.
Sepúlveda, reconoció en tribunales, en noviembre, que ella y su marido tenían relaciones sexuales frente a sus hijos y que habían abusado de Bastián.
Así, los padres fueron investigados y la Fiscalía Centro Norte confirmó que la niña había sido abusada sexualmente. Por esa razón, tanto Bravo como Sepúlveda, quedaron en prisión preventiva, por orden del Sexto Juzgado de Garantía de Santiago.
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